Temístocles Montás. La defensa de la democracia “requiere no sólo normas, sino también valores, vigilancia y responsabilidad colectiva”.
Temístocles Montás, vicepresidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), advirtió sobre los peligros para las democracias del mundo que representa la forma de hacer política dominada por el autoritarismo, el proteccionismo y el populismo.
“Las democracias están, cada vez más, bajo amenaza interna, y los países tendrán que enfrentarse a un entorno externo más volátil y menos predecible”, escribió Montás en el artículo: “Cuidado con las amenazas de la deriva antidemocrática”, publicado en los periódicos Hoy y Vanguardia del Pueblo.
Explicó que en el caso de la República Dominicana, que en las últimas cuatro décadas se ha esforzado en consolidar una democracia liberal, este contexto representa un desafío para la preservación del rumbo democrático apostando a lograr un equilibrio inteligente entre apertura económica, inclusión social y fortaleza institucional.
“La Constitución Dominicana ofrece principios importantes para evitar una deriva iliberal que entraña el populismo y autoritarismo en auge en estos tiempos, pero requiere compromisos de los partidos políticos, de todos los sectores sociales, y respeto al Estado de derecho”, expresó.
En su análisis, Temístocles Montás cita artículos de la Carta Magna que protegen la democracia en República Dominicana como el artículo 7 de nuestra Constitución que establece el Estado dominicano como Estado social y democrático de derecho, organizado para garantizar los derechos fundamentales, la justicia y la participación, el 124, que establece que, luego de un segundo período constitucional consecutivo, el presidente o la presidenta no podrá postularse jamás al mismo cargo , el artículo 134 prohíbe que el presidente se arrogue funciones legislativas o judiciales.
Establece también que la Constitución también instituye la separación de los poderes, garantizando la autonomía del Congreso Nacional, el Poder Judicial, el Tribunal Constitucional y el Ministerio Público.
“Si bien la Constitución Dominicana ofrece herramientas claras para preservar el régimen democrático liberal, en el actual contexto internacional, estas herramientas funcionan si hay actores comprometidos con la institucionalidad. La defensa del liberalismo político requiere no sólo normas, sino también valores, vigilancia y responsabilidad colectiva”, concluyó.